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Mostrando entradas de febrero, 2021

¿Tenemos obispos en las diócesis? El nuevo rito de ordenación episcopal de Pablo VI

«Revísense los ritos de las ordenaciones, tanto en lo referente a las ceremonias como a los textos. Las alocuciones del Obispo, al comienzo de cada ordenación o consagración, pueden hacerse en lengua vernácula. En la consagración episcopal, todos los Obispos presentes pueden imponer las manos». Esto señalaba el numeral 76 de la Constitución Sacrosanctum Concilium, uno de los documentos más relevantes del Vaticano II. Este documento pretendía introducir un marco legal y doctrinal nuevo que permitiera –pocos años después– codificar una nueva Misa y una reforma profunda de los sacramentos. El llamado «Espíritu del Concilio», que impregnó y marcó todo lo aprobado por el mismo, era en realidad la manifestación del espíritu modernista. Es decir, la concepción teológica bajo la que se escribieron sus documentos fue la de la Nouvelle Théologie , el catolicismo liberal y la filosofía personalista, o, por decirlo de manera más clara y sintética, ese sumidero de todas las herejías condenado

Ayunos y abstinencias para el católico tradicional

Acogiéndonos a las rúbricas de San Pío X del Código de Derecho Canónico de 1917, la ley del ayuno obliga a todos los fieles no excusados ​​o exentos, cuya edad esté entre los últimos 21 años y el comienzo de los 60 años. El de la abstinencia de carne requiere a partir de los 7 años. El ayuno consiste en una sola comida al día, pero se toleran dos pequeños refrigerios, que los teólogos limitan a 60 gramos por la mañana y 250 gramos por la noche. Los días de penitencia son los siguientes: I - Solo abstinencia: Todos los viernes del año, excepto los que caen en el día de una fiesta de precepto. II - Abstinencia y ayuno: 1) Miércoles de Ceniza. 2) Todos los viernes y sábados de Cuaresma. 3) Miércoles, viernes y sábado del Cuatro Témporas, es decir:     a) - De primavera, en la primera semana de Cuaresma.     b) - Verano , en la semana de Pentecostés.     c) - Otoño, en la tercera semana de septiembre.     d) - Invierno, en la tercera semana de Adviento. 4)  L as vigilias:     a) - De Navid

Declaración conjunta de los obispos Lefebvre y Castro Mayer

Roma nos ha hecho preguntar si teníamos la intención de proclamar nuestra ruptura con el Vaticano, en ocasión del Congreso de Asís.  Nos parece que la pregunta tendría mas bien que ser la siguiente: ¿Cree Ud. y tiene la intención de proclamar que el Congreso de Asís consuma la ruptura de las autoridades romanas con la Iglesia Católica? Pues, por cierto, es esto lo que preocupa a aquellos que aun permanecen católicos. Es bien evidente, en efecto, que desde el Concilio Vaticano II el Papa y los episcopados se alejan cada vez más netamente de sus predecesores. Todo aquello que fue realizado por la Iglesia para defender la fe en los siglos pasados, y todo lo que fue realizado por los misioneros para difundirla, hasta el martirio inclusive, es considerado de ahora en más como una falta de la cual la Iglesia debería acusarse y hacerse perdonar. La actitud de los once Papas que, desde 1789 hasta 1958, en sus documentos oficiales, han condenado la Revolución liberal, es considerado [hoy] como

Modestia masculina

 «Desde luego, parece un juego, pero no hay nada mejor que ser un señor de aquellos que vieron mis abuelos» . Así decía una canción de hace ya algunos años, y encierra una gran verdad; todos los ámbitos −incluidos el de la modestia y el buen vestir− han sufrido un proceso de degradación progresiva desde por lo menos los años 20 del pasado siglo. Dicho proceso ha implicado, no un mero cambio de moda, sino que ha sido reflejo más bien −contribuyendo también a ello− de una devastación moral. La vestimenta actual es muchas veces impura e infantil, afeminada para los varones y masculinizada para las mujeres. La simpleza que la caracteriza, ha rebajado también la gallardía y el porte de los hombres, contribuyendo a hacer de ellos carne de cañón de una sociedad nihilista, incapaz de plantarle cara a nada. Los romanos −al menos los más honorables− tenían por lema el adagio latino  « Esto vir » , es decir   « sé un hombre » , que se note que eres un varón, o como enseñó Séneca: «mantente de tal